Volvemos a la carga para comunicaros uno de los estrenos más esperados. "Las noches de insomnio", la nueva entrega de los granadinos Niños Mutantes, ya puede escucharse a través de MySpace! Temas como "Quien es mejor", "La voz" o "Mar y cielo", se descubren en este nuevo disco, que cuenta con un precedente difícil de superar: "Todo es el momento".
[caption id="" align="aligncenter" width="454" caption="Foto: Antonio García Olmedo"][/caption]
Habrá que esperar hasta el 22 de este mes de marzo para su salida oficial, pero mientras tanto, os recomendamos su escucha atenta a través del siguiente enlace.
Nuestra mirada retrospectiva de hoy va dirigida hacia uno de los grandes grupos históricos de nuestro país: Lone Star. No es un grupo típico, y es por muchos considerado una de las formaciones musicalmente más interesantes que ha dado nuestra música, pese a que para otros muchos no sea fácil dar un título de su discografía. Pioneros en muchos ámbitos, como la composición en inglés o la combinación de géneros, indudablemente merecen un lugar en este espacio.
La historia empieza en 1959, cuando el barcelonés Pedro Gené (pianista de conservatorio), se marcha durante un año a Londres, donde vive toda la eclosión del nuevo sonido del rock. A su vuelta a la capital catalana, trae consigo la idea de formar un grupo. Así que reúne a unos compañeros de estudio y de ahí nace la primera formación: Rafael de la Vega (bajo), Enrique López (batería), Enric Fuster (piano) y Pedro Gené (voz y guitarra). A lo largo de la larga carrera del grupo (su primer disco se grabó en 1962 y sus últimos conciertos fueron en 1996), los cambios en su formación fueron constantes (llegaron a haber quince componentes diferentes), aunque el grupo nunca dejó de contar con su fundador.
Una vez definida la banda, su camino discográfico se inició con EP de cuatro canciones, de las cuales destaca “My Babe”; no en vano, es el primer rock en inglés grabado en España.
Los logros siguieron. En uno de sus siguientes EPs, Lone Star graba una versión en castellano de "House of the rising sun" de The Animals, traducida como “La casa del sol naciente”. Su éxito es tal que en España y Sudamérica llega a venderse más que la versión original, lo cual lleva a EMI a organizar un concierto con ambos grupos. De nuevo el éxito de la iniciativa, obligó a EMI a repetir el evento.
Corría el año 1965. Pedro intentaba lanzar sus propias canciones, pero EMI solo quería versiones para seguir cosechando ventas: "Comprensión" ("Don't let me be misunderstood"), Yo lloro (I'm crying) o Muy lejos de aquí (We gotta get out of this place), así como también alguna de los Rolling Stones como "Satisfacción" o "Aquí en mi nube".
Por fin en 1966, Gené consigue un acuerdo con la discográfica y lanzan un disco compuesto al cincuenta por ciento de versiones y creaciones propias: “Antología de un conjunto “, del cual destacan “La leyenda” y “Río sin fin”. Y es aquí cuando comienza la verdadera etapa de creación propia del grupo, que por aquel entonces hacían algo inusual: tocaban rock y jazz, dividiendo incluso sus conciertos en estos dos géneros.
Los éxitos se suceden: “Mi calle” o “Lyla” (1968), “La trilogía” (que fue elegido mejor tema del año 1969), “Spring 70” (1970) o en 1972 “Chica solitaria“ o “My Sweet Marlene”. Es en ese año cuando Lone Star realiza conciertos en lugares tan dispares como el portaviones estadounidense “John Fitzgerald Kennedy” o el Palau de la Música Catalana, lugar por aquel entonces poco dado a ese tipo de eventos. Vale decir que en aquella ocasión, al jazz y al rock se añadió la música clásica.
Tras “Pobre pescador” (1974) con la discográfica Diresa, en 1975 y con Diplo Records, consiguen otro de sus hitos como banda: se convierten en el primer grupo en hacer “rock català“. En los años siguientes, el grupo sigue el carrusel de cambios internos y de publicación de álbumes, aunque ya sin tanto éxito. Pese a ello, en la memoria quedan momentos como el concierto que ofrecieron en Montjuïc junto a Eric Burdon en 1982 en la “Festa del Treball” con una asistencia de 120.000 personas. Ese mismo año graban el que sería su último gran trabajo, “Viejo Lobo”.
En la década de los noventa, tras cuarenta años de carrera, el grupo hizo algunas apariciones, como la del festival GREC de Barcelona en 1996, donde interpretaron sus éxitos con amigos como Manolo García, Loquillo, Los Rebeldes o Rosendo. Su despedida definitiva llegaría poco después con un concierto en el "Mercat de Música Viva de Vic". Así se cerraba la historia de uno de los grupos más importantes, como también menos conocidos y valorados de nuestra historia musical.